lunes, 26 de enero de 2009

Manto o Sábana


Que cuadro tan más raro el que nos muestra marcos en este párrafo, un joven que no tiene historia, ni nombre, nada, solo una sábana sobre su cuerpo, es el único pasaje en la Biblia que habla de el, cuando lo leí, me di cuenta que muchos músicos y predicadores andan igual que este joven, con una falsa cobertura sobre su cuerpo, engañados con una sabana, pero a la ves están desnudos, y esa es la razón por la cual vemos músicos que no pertenecen a ninguna Iglesia, sino que quieren vivir en la fantasía de los conciertos, donde son admirados y adulados, donde se les pide un autógrafo, donde las jóvenes los buscan, y donde las personas los rodean haciéndoles cualquier pregunta, por que el músico siempre quiere ser el centro de atención, y andan envueltos en una sabana, que aunque visiten Iglesias no son parte integral de ninguna de ellas, no quieren compromisos ministeriales, porque les gusta demandar sus derechos, y no rendir sus derechos, por eso es que los vemos cambiar de Iglesia fácilmente porque no hay raíces en ellos, y en el primer problema se van y dejan tirada la sabana, de igual manera pasa con algunos “Predicadores a domicilio”, no tiene casa, son ermitaños espirituales, son sobornadores del evangelio, usan la palabra de Dios para lucrarse, eso es pecado, debemos de tener una casa donde vivir, donde trabajar, donde dar reportes, donde comer.
Recuerdo que conocí a un hombre que era un buen predicador, pero que por tantas invitaciones que tenia a predicar comenzó a corromper su corazón, a tal manera que cuando no tenía dinero llamaba a algunos pastores para que lo dejaran predicar y así recibir una ofrenda de dinero, corrompió su alma, hoy es un vago espiritual, sin casa, sin padre, sin hermanos a quien servir, pero peor aun es que Dios ya no esta con el, abandono el manto que tenia y se arropo con una sabana.
No importa lo que venga, debes de tener carácter en las situaciones de la vida para no salir huyendo, se fiel a tu Iglesia, se fiel a la visión que Dios te a dado, y recuerda que Dios honra a los que le honran, y en su tiempo Dios hará brillar sobre tu cabeza el sol de justicia y te hará resplandecer como la luz de la aurora, he irás de aumento en aumento.

Por: Anthony Hernández
Credo Producciones
(504) 9776-5242

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