sábado, 28 de marzo de 2009

Las Cuatro Naturalezas de la Adoración


Las Cuatro Naturalezas de la Adoración

Apocalipsis 4:6-8; 5:8-9

La visión del trono:
El capítulo 4 de Apocalipsis describe la revelación de la alabanza y adoración celestial, esta revelación es una figura para que en la misma actitud nosotros alabemos al Señor.

Los 4 seres vivientes:
Estudiaremos a los 4 seres vivientes que representan las 4 naturalezas del adorador.
La Biblia describe a estos 4 seres vivientes con rostros de animales porque quiere que observemos el carácter y conducta del animal para así aprender del mismo.
Es importante mencionar que estos seres vivientes son los que están más cerca del trono (4:6),
También podemos ver que son los que dirigen la alabanza en la congregación celestial (4:8).

El carácter de cada animal derrota estructuras y establece frutos en nuestras vidas.
El León: (No tiene miedo a su oponente) - Naturaleza de Poder, Fuerza y Guerra. Declaración de lo que Dios ha hecho. El León es un animal que defiende a su familia. En la Biblia dice que Jesús es "el León de la Tribu de Judá."
(Proverbios 28:1, 30:30, 1ª. Crónicas 12:8, Salmo 47:1, 49, Efesios 5:5.)

Esta Naturaleza es aquella en la que entonamos cantos confesando que El Señor es poderoso, que es victorioso, que ha vencido.
La adoración del León quebranta potestades y principados de temor y establece nuestra victoria en Fe.

El Becerro: (Representa la juventud del siervo o buey) Naturaleza de regocijo, de alegría.
El becerro es un animal que se caracteriza por estar siempre saltando y esto representa la danza o cuando entonamos cánticos de gozo (Salmo 29:6, Lucas 25).

La adoración del Becerro quebranta la tristeza y establece el gozo en nosotros.

El Hombre: (Representa la fragilidad humana). Naturaleza de intercesión por necesidad.
Efesios 4:22,24 expresa el dolor del corazón.
Salmo 42:5, David reconocía su dolor, la fe no niega la fe.
Abraham entonó cánticos de recibir no de dar.
Dios nos quiere enseñar a recibir misericordia y gracia (Salmo 3).

Esta Naturaleza es cuando cantamos cantos en los que intercedemos ante el Señor pidiendo que nos renueve, cambie, restaure, transforme, perdone, llene de su amor, etc.

La adoración del Hombre quebranta la necesidad y establece la esperanza en Dios.

El Águila: (Es un animal que vive en las alturas) - Naturaleza de Adorador.
(Isaías 40:31, Salmo 103)

Hay cuatro cosas referentes al águila:
Vuela más alto que todas las aves. Fuimos creados para volar alto.
Ve más allá que cualquier creación,
Para empezar el vuelo debe dar unos saltos para atrapar una corriente de aire.
Dios quiere que volemos pero necesitamos saltar para adorarle. Al encontrar la corriente solo planeamos a lugares altos.
Renueva sus plumas cada 2 años. Dios ha hecho que la adoración nos renueve (Salmo 145).

Esta Naturaleza es otra dimensión es la intimidad, de adoración, el verle cara a cara, es cuando declaramos el deleite de adorarle de estar con El Señor, manifestando nuestro amor hacia Él.

La adoración del Águila quebranta el pecado y establece la Comunión con Dios.

Conclusión.
No es necesario que seamos líderes de alabanza en nuestra congregación para que pongamos en práctica todo lo que aprendemos respecto a la alabanza y adoración, sino simplemente debemos anhelar adorar al Señor en "Espíritu y Verdad", aunque muchas veces no tenemos esa disposición por que creemos que no somos dignos de acercarnos al Señor o porque no nos sentimos atraídos a Él.
Debemos entender claramente que nadie es merecedor de acercarse ante Él pero nosotros, sus hijos, por gracia podemos acercarnos al Padre de misericordias; y sino nos sentimos atraídos, el Señor mismo te atrae a su presencia, solo tenemos que pedirle que Él obre el querer y el hacer en nosotros.

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