viernes, 19 de diciembre de 2008

Ángeles caídos o Demonios


Introducción.
La Biblia que es la palabra infalible de Dios, nos describe claramente la existencia de ángeles caídos en nuestro planeta.
¿Quiénes son estos ángeles? ¿Cómo cayeron? ¿Cuándo cayeron? ¿Como podemos enfrentarlos? Todas estas preguntas trataremos de analizarlas a través de la luz de la palabra de Dios.
Hay dos tipos de ángeles caídos o demonios.
A) Los ángeles que fueron arrojados del cielo.
B) Los ángeles que cayeron.

1. Los ángeles que fueron arrojados del cielo.
Cuando hablamos de este tipo de ángeles, estamos hablando de los poderes sobrenaturales que envuelven al mundo de hoy, que comúnmente los llamamos demonios o malos espíritus.
Estos ángeles son los que se revelaron en el cielo engañados por Satanás:
“También apareció otra señal en el cielo: he aquí un gran dragón escarlata, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y en sus cabezas siete diademas; y su cola arrastraba la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó sobre la tierra”. (Apocalipsis 12: 3-4.)

Cuando la Biblia habla de que con su cola el dragón, o la serpiente antigua arrastró la tercera parte de las estrellas, otra posible traducción es: “con su engaño arrastro la tercera parte de los ángeles”.
Cuando la Biblia habla de estrellas casi siempre habla de ángeles:
“¿O quién puso su piedra angular, Cuando alababan todas las estrellas del alba, Y se regocijaban todos los hijos de Dios?” (Job 38:6 -7.)

Ahora, pero estos ángeles no fueron encarcelados aquí en la tierra, solamente fueron expulsados del cielo y arrojados a la tierra, estos son los que se mientan en Efesios:
“Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes”. (Efesios 6: 12.)

Estos ángeles compartieron la visión de su líder que es Satanás de quitar a Dios de su trono, este era el pensamiento de Satanás:
“¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones.
Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo”. (Isaías 14: 12-14.)

Por esta razón hubo una gran batalla en el cielo.
“Después hubo una gran batalla en el cielo: Miguel y sus ángeles luchaban contra el dragón; y luchaban el dragón y sus ángeles; pero no prevalecieron, ni se halló ya lugar para ellos en el cielo. Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él”. (Apocalipsis 12: 7-9.)

De esta manera es que podemos entender porque la tierra estaba desordenada y vacía en el principio.
“En el principio creó Dios los cielos y la tierra. Y la tierra estaba desordenada y vacía, y las tinieblas estaban sobre la faz del abismo, y el Espíritu de Dios se movía sobre la faz de las aguas”. (Génesis 1: 1-2.)

Si conocemos el carácter de Dios nos daremos cuenta de que Dios es perfecto y es un Dios ordenado, él nunca haría una creación desordenada y vacía.
Si estudiamos bien estos versículos, nos daremos cuenta de que Dios en el verso uno hizo una creación perfecta, hermosa, punto y aparte, pero antes de llegar al verso dos, tubo que haber pasado algo, porque ya la tierra estaba arruinada.
La batalla que hubo en el cielo fue tan grande que afecto al universo entero incluyendo la tierra.

Estos ángeles fueron fieles servidores de Satanás, aunque su fin sea el lago de fuego.
“Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles”. (Mateo 25: 41.)

Y no solo ellos, sino también las personas que estén bajo su poder o influencia.
“Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego”. (Apocalipsis 20: 15.)


2. Ángeles caídos
Este otro tipo de ángeles no son los mismos que fueron arrojados junto a Satanás, la caída de estos ángeles los encontramos en Génesis:
“Aconteció que cuando comenzaron los hombres a multiplicarse sobre la faz de la tierra, y les nacieron hijas, que viendo los hijos de Dios que las hijas de los hombres eran hermosas, tomaron para sí mujeres, escogiendo entre todas. Y dijo Jehová: No contenderá mi espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; mas serán sus días ciento veinte años. Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre”. (Génesis 6: 1-4.)

En el vrs. 2 habla acerca de unos “hijos de Dios”, ¿Quiénes son? Algunos asumen que eran de la descendencia piadosa de Set, hijo de Adán, ahora si estudiamos a los hijos de Dios encontraremos que a los ángeles también se les llama hijos de Dios:
“Un día vinieron a presentarse delante de Jehová los hijos de Dios, entre los cuales vino también Satanás”. (Job 1:6.)

“Aconteció que otro día vinieron los hijos de Dios para presentarse delante de Jehová, y Satanás vino también entre ellos presentándose delante de Jehová”. (Job 2: 6.)
Estos hijos de Dios estaban delante del trono de Dios, lo cual ningún ser humano puede hacer literalmente, estos eran seres espirituales o ángeles.
La caída de estos seres fue a causa de su perversión con las hijas de los hombres.
En la tierra ya existían los gigantes:
“Había gigantes en la tierra en aquellos días, y también después que se llegaron los hijos de Dios a las hijas de los hombres, y les engendraron hijos. Estos fueron los valientes que desde la antigüedad fueron varones de renombre”. (Génesis 6: 4.)
Pero después de que estos ángeles se pervirtieran con las mujeres, ellos engendraron hijos, los cuales fueron cazadores y personas de mucho renombre, estos siguieron siendo gigantes, lo único que con habilidades extraordinarias y características especiales a los cuales se les considero como grandes hombres, los cuales estaban endemoniados o poseídos por estos pervertidos ángeles.
A estos ángeles Dios no los expulsó ni siquiera Satanás los engañó, fueron ellos mismos que siendo guiados por su perversión cayeron en fornicación y pecados sexuales, por eso fue la causa del diluvio.
En el libro de Judas nos confirma lo que acabamos de ver.
“Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día”.
(Judas 6.)
“sino que abandonaron su propia morada” como hemos dicho antes a ellos nadie los engaño, y nadie los expulsó del cielo, sino que ellos mismos dejaron su propia morada.

Estos ángeles eran los que gobernaban en las ciudades de Sodoma y Gomorra, en el vrs. 7 dice:
“Como Sodoma y Gomorra y las ciudades vecinas, las cuales de la misma manera que aquéllos, habiendo fornicado e ido en pos de vicios contra naturaleza, fueron puestas por ejemplo, sufriendo el castigo del fuego eterno”. (Judas 7.)
“De la misma manera que aquellos” ¿Cuáles aquellos? ¿Quiénes son aquellos de los que habla Judas en este versículo? Son los mencionados en el verso 6, los ángeles caídos.

¿Dónde están estos ángeles?
Todos sabemos que hay dos lugares de castigo:
El lago de Fuego:
“Y el diablo que los engañaba fue lanzado en el lago de fuego y azufre, donde estaban la bestia y el falso profeta; y serán atormentados día y noche por los siglos de los siglos”. (Apocalipsis 20: 10.)

El Infierno:
“Aconteció que murió el mendigo, y fue llevado por los ángeles al seno de Abraham; y murió también el rico, y fue sepultado. Y en el Hades alzó sus ojos, estando en tormentos, y vio de lejos a Abraham, y a Lázaro en su seno. Entonces él, dando voces, dijo: Padre Abraham, ten misericordia de mí, y envía a Lázaro para que moje la punta de su dedo en agua, y refresque mi lengua; porque estoy atormentado en esta llama. Pero Abraham le dijo: Hijo, acuérdate que recibiste tus bienes en tu vida, y Lázaro también males; pero ahora éste es consolado aquí, y tú atormentado. Además de todo esto, una gran sima está puesta entre nosotros y vosotros, de manera que los que quisieren pasar de aquí a vosotros, no pueden, ni de allá pasar acá”. (Lucas 16: 22-26.)
En el vrs. 23 habla de un hades, en griego quiere decir: “Lugar de los muertos”, este hades es el mismo infierno o lugar de tormento.
Estos demonios no andan en la tierra como los que fueron lanzados con Satanás, están en estas prisiones, en este lugar de tormento.

¿Por qué estos ángeles caídos están en el infierno o hades y no en el lago de fuego?
Judas 6 dice: “Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día”.
2 de Pedro 2: 4 dice: “Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio”

¿Donde esta el Infierno?
Según la Biblia el Infierno esta en el centro de la tierra, ejemplo de Lucas 16.
Por esta causa es que la Biblia dice que Jesús descendió al centro de la tierra:
“Porque como estuvo Jonás en el vientre del gran pez tres días y tres noches, así estará el Hijo del Hombre en el corazón de la tierra tres días y tres noches”. (Mateo 12. 40.)

“Y eso de que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más bajas de la tierra? El que descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para llenarlo todo”. (Efesios 4: 9-10.)
Jesús descendió hasta donde estaban estos espíritus encarcelados.
“Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu; en el cual también fue y predicó a los espíritus encarcelados, los que en otro tiempo desobedecieron, cuando una vez esperaba la paciencia de Dios en los días de Noé……”
(1 Pedro 3: 18-20ª.)

Cuando Jesucristo bajó a predicarles, no fue a la gente que estuvo en el tiempo de Noé, porque a ellos se les predico por un montón de años y no quisieron creer, por tanto murieron en el diluvio, Jesús les predico a los espíritus encarcelados, pero su mensaje no fue un mensaje de arrepentimiento, sino un mensaje de victoria, proclamando que de aun allí Dios lo iba a levantar con Poder y con gran Gloria, y proclamo la derrota del reino de las tinieblas y le quito las llaves del abismo al que las tenía, y se proclamo como vencedor.
Jesús no descendió Glorificado, sino vivificado, o sea muerto en la carne pero lleno de vida en el espíritu, venciendo la muerte con la vida del espíritu.

Estos ángeles no pueden salir de ese lugar, ya que han sido encarcelados allí hasta el juicio final.
“Y a los ángeles que no guardaron su dignidad, sino que abandonaron su propia morada, los ha guardado bajo oscuridad, en prisiones eternas, para el juicio del gran día”.
(Judas 6.)

Conclusión.
Debemos de darnos cuenta que el mundo espiritual, es un mundo que aunque ya esta vencido todavía sigue atacando a los escogidos de Dios, pero Cristo gano la victoria y nos a dado el poder para vencer todo ataque del enemigo, mantengámonos firmes, peleando la buena batalla, que aunque el diablo siga lanzando dardos de fuego, no olvidemos que Dios, nuestro Dios es fuego consumidor.
Nuestra es la victoria, por que son más los que están con nosotros que los que están contra nosotros, más podremos nosotros que ellos y los comeremos como pan. ¡Amen!

Por: Anthony Hernández
Credo Producciones

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